Los niños disfrutaron de lo lindo de una representación muy interactiva y participativa en la que se mezclaba la ciencia, el humor y sobre todo la sorpresa a partes iguales. Algunos de los que allí nos encontrábamos de espectadores fuimos partícipes muy directos de la obra, ya que cuando menos lo esperábamos los actores bajaban al público y subían al escenario a algunos de los niños, y como no, también a una maestra.
¡Los alumnos lo pasaron muy bien. Fue todo un éxito!
Os dejamos algunas imágenes de aquella mañana.
¡LA CIENCIA PUEDE SER MUY, MUY DIVERTIDA!