Comenzamos una nueva
etapa en “Un pequeño mundo de colores”,
en el que además de compartir
experiencias de mi ámbito profesional también trataré de contar otras relacionadas
con el mundo de la maternidad que
recientemente he descubierto.
La primera entrada de este nuevo espacio en el blog, al que
voy a llamar BBMUM , se la quiero dedicar a los temidos “Cólicos del lactante”.
Antes de ser mamá había escuchado algo sobre ellos, alguna
amiga o vecina comentaban que sus pequeños los tenían o habían tenido, pero
en realidad pensaba que era algo de poca importancia que estaba relacionado con pequeños dolorcillos de
barriguita y gases. Pero por desgracia no estaba en lo cierto.
La vedad que nadie sabe, ni qué son en realidad, ni el porqué aparecen.
Los propios pediatras no saben darte una explicación. Hay muchas teorías y distintos medicamentos para
paliar los síntomas pero realmente no existe ningún tratamiento eficaz.
Es muy traumático para cualquier padre no poder calmar de ninguna manera ese llanto tan inconsolable de su bebé. La medicina más
recomendada es la PACIENCIA.Claro, cuando
vas al médico y te dicen eso, es como si se te cayera el mundo encima ya que
piensas que paciencia y amor es lo que menos te falta con tu pequeño pero compruebas
que no es suficiente.
No todos los bebés los sufren,, ni tampoco con la misma
intensidad pero los que los padecen suelen comenzar con ellos a las dos semanas
de vida y les pueden durar hasta los tres meses aproximadamente. Suelen darle
al caer la tarde y alargarse durante
horas.
Algunos medicamentos que te prescriben para ellos: Colikind, Carminativo Juventus,
Aeroed… Sinceramente, no creo que sean efectivos, quizás palien algo (efecto placebo), pero el
fin de los “CÓLICOS” es el tiempo.
Cosas que no tienen que ver con la medicina, ni están
comprobadas científicamente, pero que a algunos pequeños les ayuda:
-
Montarlos en la silla del coche y llevarlos a dar una vuelta. Parece mentira
pero se suelen relajar e incluso se quedan dormidos.
-
Sonidos repetitivos de algunos electrodomésticos:
secador, lavavajillas, calefactor… Esos sonidos suelen captar su atención,
centrándose en ellos y les relaja.
-
Masajes en la tripita y movimientos en las piernas. Yo no recomiendo que se hagan
cuando el bebé está sufriendo la crisis. Realizarlos tras el baño, los cambios
de pañal…
-
Cogerlos en brazos y ponerlos cerquita de nuestro pecho. Que sienta el calor y escuchen nuestro corazón. A veces pensaremos que no sirve
porque el bebé no deja de llorar pero no es así. Al menos no está solo y le
acompañamos en esos duros momentos para ellos.
-
Cogerlos con la mano en la barriguita también
les alivia.
En definitiva, los llamados cólicos del lactante son una auténtica
pesadilla para los padres ya que se ven
impotentes ante ese llanto tan intenso que se les presenta a los bebés sin causa aparente.
Curiosamente, de la
misma manera que aparece, desaparece. Por ello, los papás no se tienen que sentir culpables en ningún momento. Su bebé está sano y tienen que disfrutar de él. Se necesita mucho ánimo y apoyo porque no es nada fácil. Pero aunque no sirva de consuelo, PASARÁ.
Muy buenos consejos!!Me hiciste recordar cuanto lo he sufrido con mi hija, de esto hace ya muchísimooooos años.
ResponderEliminarEspero que estés disfrutando mucho de esta hermosa etapa con tu hija.
Un gran abrazo.
Muy buenos consejos!!Me hiciste recordar cuanto lo he sufrido con mi hija, de esto hace ya muchísimooooos años.
ResponderEliminarEspero que estés disfrutando mucho de esta hermosa etapa con tu hija.
Un gran abrazo.
Muchísimas gracias, Sandra! Es lo mejor que me ha pasado. Besitos.
EliminarNO sabía nada!! Enhorabuena, y ya pasará. Una nueva etapa que cuando se pase este momento la disfrutarás mejor. un besazo guapa.
ResponderEliminarMil gracias, Teresa! Sí, ya tiene 4 mesecillos y los cólicos ya pasaron. Besos.
EliminarLola, seguro que estás disfrutando muchísimo de esta nueva etapa de tu vida. Me alegro un montón. Una entrada muy interesante. Un abrazo y muy buen finde.
ResponderEliminarMuchas gracias Ana. La verdad que sí, es lo mejor del mundo. Un besazo.
EliminarBienvenida de nuevo al mundo bloguero Lola. Yo sé muy bien de que hablas, 4 meses de llanto desconsolado de 19,00 a 21,00 horas todos los días padecimos nosotros, pero poco a poco disminuyeron hasta desaparecer. Muy buen consejo: PACIENCIA. Disfruta de tu maternidad que crecen muy rápido. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Eva. Ahora tengo el tiempo más limitado, ya sabes, los primeros meses son más complicados pero intentaré pasarme por aquí siempre que pueda. Muchos besitos.
Eliminar